¡Héroes, espero que asesinen algún monstruo!
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"¡¡¡¡¡RAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAWWWWWWWRRRRRRRRRRRR!!!!!"

Mientras Erik corría hacia la quimera junto a Raphtalia de pronto la quimera dio un rugido y ambos se quedaron congelados, sin poder moverse.

Entonces Erik vio su estado y noto dos pequeños iconos, un rayo y una especie de fantasma oscuro. Al ver el rayo pensó de inmediato que era una especia de parálisis como aparecía en la barra de estado cuando luchaba contra los tipo eléctrico cuando jugaba p*k*m*n.

La quimera noto que su rugido había funcionado por lo que rápidamente ataco a las dos nuevas presas que aparecieron, interrumpiendo su comida.

Salto sobre Erik ya que era el mas cercano, solo a unos pocos metros, ademas era el intruso del que sus sentidos le advertían que era el mas peligroso del lugar por lo que quería deshacerse rápidamente de él.

Erik vio como la cabeza de león de la quimera tenia la boca abierta revelando las decenas de dientes afilados pero no entro en pánico y cuando estaba a punto de ser devorado por la criatura.

Se movió lo más rápido que pudo y cambio de forma sus tonfas de mapache a las tonfas de espinas mientras rápidamente golpeaba con ambas tonfas, luego de notar que los debuff desaparecieron bastante rápido, no sabia realmente la razón pero pudo estar relacionada con el aumento de su nivel.

Con la tonfa en su mano izquierda cubierta es espinas bastante largas, golpeo dentro de la boca de la quimera mientras las tonfas creaban aun más espinas lo más rápido que podía en un instante mientras estas se quebraban rápidamente al chocar contra la boca de la quimera.

Con la tonfa en su mano derecha, también con espinas bastante largas, pero estas solo estaban ubicadas en la punta de la tonfa, ataco el ojo izquierdo de la quimera, enterrando las espinas lo mas profundo posible con la esperanza de atravesar el cerebro antes de que las espinas se quebraran.

Al dar los golpes en menos de un segundo, Erik se retiro al instante ya que las otras  cabezas de la quimera se movieron para devorarlo, al notar que la presa que pensaban que era inofensiva ataco la cabeza del león que iba a terminar con esta. Erik no tenia suficiente tiempo ni espacio para esquivar ya que atrás de el se encontraba Raphtalia por lo que uso cada brazo para defenderse de las cabezas.

Usando toda la fuerza que tenia para bloquear la cabeza de cabra y la de dragón, pero Erik no noto hasta que fue tarde que la cola con cabeza de serpiente se dirigía hacia él desde el centro, donde la melena de la cabeza caída del león ocultaba el avance de la misma.

"¡Mierda!" Erik solo podía esperar que el veneno no fuera muy poderoso o que su arma legendaria le diera alguna resistencia contra el veneno. Ya que si dejaba de bloquear a las otras cabezas, no solo él estaría en peligro, sino que Raphtalia también lo estaría y después de pasar el tiempo juntos estaba bastante encariñado con ella para verla lastimada por lo que solo pudo mantener su bloqueo.

Pero mientras la cabeza se acercaba, esta de pronto cayo y choco contra el pecho de Erik, para terminar cayendo al suelo. Luego la cabeza de dragón dejo de atacar a Erik para dar un mordisco a una figura que apareció al lado de su cuerpo.

Al tener un brazo libre, Erik golpeo con la tonfa de espinas hacia los ojos de la cabeza de cabra, dejándola cegada y con espinas aun visibles dentro de sus ojos, o lo que quedaban de ellos mientras la cabeza soltaba gemidos de dolor.

Al librarse de la cabeza de cabra rápidamente noto que la cabeza de dragón intentaba morder a Raphtalia mientras esta se encontraba apuñalando el costado del cuerpo de la quimera. Cuando Erik estaba a punto de cambiar sus tonfas de espinas a las tonfa blasters, vio que Raphtalia soltó la espada que estaba clavada en la quimera y se deslizo por debajo del cuerpo de la quimera hasta llegar al otro costado del cuerpo donde saco la espada de repuesto que tenia en la cintura y la enterraba en el cuerpo de la quimera.

Ambas cabezas de la quimera botaron una gran cantidad de sangre mientras soltaban un gruñido de dolor, mientras la quimera intentaba tomar una postura con la cabeza de dragón tomando el control del cuerpo, pronto colapso en el suelo y dejo de mover su cuerpo, Erik y Raphtalia observaron que la criatura dejo de respirar y entonces notaron en el cielo que la brecha creada por la Ola de destrucción, había comenzado a cerrarse y el cielo volvió a tener un color natural.

Al notar que todo había terminado, Erik y Raphtalia soltaron un suspiro de alivio.

"Buen trabajo, Raphtalia" Erik dijo mientras le daba palmaditas en la cabeza a Raphtalia.

"Gracias, Erik-sama. Buen trabajo a ti también" Dijo Raphtalia mientras su cola se movía de un lado a otro al sentir las palmaditas de Erik, aunque eso no duro mucho.

"Bueno, entonces si ya se pueden mover, comiencen a matar a los monstruos remanentes de la Ola, ahora mismo Naofumi esta defendiendo un pueblo cercano de los monstruos que trajo de Ola. Si se consideran héroes del mundo, deberían poder eliminarlos fácilmente ¿no?" Erik dijo mientras miraba a los héroes que estaban pasmados en su lugar, ya que el efecto de parálisis debió haber acabado mientras aun luchaba contra la quimera, como ocurrió con Raphtalia.

"Vamos, Raphtalia. Debemos ir con Naofumi a eliminar los monstruos que queden"

"¡Si, Erik-sama!"

"¡Héroes, espero que asesinen algún monstruo! ¡Ya que hasta ahora incluso el héroe del escudo a eliminado decenas de monstruos mientras ustedes estaban jugando con el jefe!" Dijo Erik mientras corría hacia el pueblo ya que aunque se sentía algo cansado después de correr todo el camino para luchar contra el jefe y después de la batalla, volver corriendo al pueblo, su energía no era infinita por lo que tuvo que bajar el ritmo de su carrera para recuperar algo de energía.

Incluso Raphtalia a pesar de que no dijo nada, estaba aun mas agotada ya su nivel era menor que el de Erik por lo que tuvo que poner aun mas poder en sus golpes para poder herir a la quimera.

Erik sabia que no estaban en buen estado para seguir luchando pero si se quedaba en el área del jefe y les decía a los otros héroes que fueran donde Naofumi para ayudarlo mientras él descansaba, sin duda objetarían e incluso lo podrían acusar de intentar acaparar el botín del jefe. Por lo que ninguno iría a ayudar a Naofumi. Por lo que lo único que podría hacer era ser el primero en dirigirse hacia Naofumi y provocar a lo héroes diciéndoles que Naofumi había ayudado mucho mas que ellos deshaciéndose de los monstruos comunes de la ola, mientras ellos ni siquiera pudieron derrotar al jefe después de luchar contra el durante tanto tiempo.

Ademas si obligaba a los héroes a ir a ayudar a Naofumi mientras él se quedaba en la ola, la jodida princesa podría acusarlo de algún crimen severo y tendría a todo el reino corrupto persiguiéndolo por algún crimen que no cometió.

Al llegar al pueblo, noto que el área al centro del pueblo estaba cubierta de fuego con varias decenas de cadáveres de monstruos y múltiples agujeros en el suelo, lo cual parecía como si hubieran lanzado múltiples granadas por toda el área. Luego vio como Iggyn, el esclavo de Naofumi, ataco a un soldado bigotudo con su lanza, mientras otro se adelanto para bloquear el ataque de Iggyn.

Erik solo noto que Naofumi y el soldado bigotudo se decían algo, antes de que el bigotudo se dirigiera hacia el bosque donde se encontraba él y Raphtalia.

Mientras el bigotudo y sus soldados pasaban a su lado mientras este lo miraba con desdén y soltaba un bufido sin darle otra mirada.

Erik lo ignoro aunque Raphtalia parecía querer golpear al soldado pero estaba muy cansada para hacer o decir algo, mientras intentaba recuperar el aliento.

Erik se acerco a Naofumi y noto que los aldeanos pronto salieron de un cobertizo del pueblo mientras agradecían a Naofumi por protegerlos y cuando vieron a Erik y Raphtalia también le dieron las gracias por salvarlos.

"¡Hey, Naofumi! Al parecer el escudo no es tan débil como todos creían, ya pudiste proteger a los aldeanos de las decenas de monstruos que los atacaban" Erik sonrió  mientras estiraba su mano poniendo el puño hacia Naofumi.

"...Haaa, fue gracias a su ayuda y que pudieron cerrar la brecha de la ola. Si te hubieras tardado más, Iggyn y yo estaríamos sin energía para seguir defendiendo el pueblo" dijo Naofumi mostrando una pequeña sonrisa en su rostro mientras golpeaba el puño de Erik. Y los cuatro se sentaron mientras intentaban recuperar las energías de esta larga batalla.

Fue entonces que Erik recordó que se apresuro a llegar al pueblo para incentivar a los héroes a que se dirigieran al pueblo para matar monstruos, pero al ver que no quedaba ninguno, se pregunto si los héroes acaso fueron más inútiles que los aldeanos ya que incluso ellos habían matado a algunos monstruos.

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